lunes, febrero 13, 2012

yucatán parte 2

Regresamos a Campeche para los últimos días de la feria de reyes. Allí vendiendo en la calle nos encontramos con nuestros compas del camino en "la maluka"... y pronto toda esta banda de gente se alojó en la palapa primeramente, para después mudarse a la casa de nuestro amigos (julio y yani) en los bordes de la ciudad. La casa era pequeña pero el corazón grande,... para nosotros se convirtió en la base necesaria para producir artesanía y pasar mas cómodos estos primeros meses de embarazo. Así pasábamos gran parte del día fabricando y compartiendo con los amigos y por las noches karavaneabamos hacia el centro de la ciudad tratando de vender. Las ventas no iban muy bien, apenas sacábamos lo justo para los gastos diarios (lo que era poco teniendo en cuenta que no pagábamos alquiler). Con los primeros pesos de más que logramos ahorrar hicimos una nueva eco y el diagnostico del Dr. con su súper-computadora nos revelaba un embarazo de 16 semanas y oh sorpresa! sacando cuentas supimos que nuestro bebé tuvo su primer segundo de vida "allá en el rancho" de chapala, a miles de kms de ahí..! Bueno seguíamos con la idea de ahorrar un dinero para poder viajar tranquilos por Yucatán, pero esto no sucedía y enseguida se nos vino febrero encima y la cosa parecía estancada. Fue entonces que para la segunda semana de febrero decidimos nuevamente partir hacia la aventura, otra vez sin dinero. Nos despedimos de nuestros hermanos julio y yani con promesas de regresar, nos habían ofrecido tanto la casa como la palapa para recibir a nuestro bebé, lo íbamos a pensar... pues bien salimos en karavana hacia el norte, hacia Mérida, y luego tomamos por la "ruta puc"; una carretera que visita una docena de templos mayas. como no teníamos mas que lo puesto intentamos sin éxito convencer a la gente de la puerta de los templos que nos dejen entrar a echar una miradita.., pero sin dinero... nadie le dio chance a estos hippies de poder acceder a estos hermosos legados culturales. Y como si fuera poco nos querían aplicar la máxima tarifa, la de los gringos... bueno después de intentarlo en varios lugares desistimos de nuestro paseo cultural y más bien lo que hicimos fue la "ruta de las puertas" de los templos y ciudadelas mayas. todo quedará pa la próxima pensamos, tal vez algún día cuando seamos millonarios jeje... acabada la ruta puc salimos a un cruce de carreteras y a un pueblito perdido cuyo principal atractivo era ninguno. Bien nos estacionamos en la plaza a descansar del calor, a cocinar y pusimos la artesanía por si acaso. Allí se arrimaron una chicas de la escuela pero sin un peso y si bien no nos compraron nada nos dijeron que existía un cenote en el pueblo, el "cenote de pablo" y según parecía no era muy caro. Fuimos con el maxi a averiguar de qué se trataba..., caminamos según las indicaciones hasta un taller de motos y preguntamos por pablo... nos hicieron pasar por un pasillo lateral de la casa hasta el fondo donde pablo le daba con un martillo a el eje de una moto..., todo estaba un poco sucio con grasa y aceite, y alli se apilaban restos de motos desarmadas. Un tanto confundidos le preguntamos por el cenote y pablo nos dijo -si claro, son $20 pesos cada uno! - nos reímos, ¿pero dónde estaba el cenote? y también le pedimos una rebaja por adelantado... pablo nos enseño una plataforma de cemento en el medio del taller y por allí bajaba una escalera casi vertical de cemento, como unos 4 m. Nos encendió las luces y sorpresa... era increible... si que habia cenote y era hermoso. Pablo nos explico que haciendo un pozo pa buscar agua descubrieron este cenote que en su momento era virgen... bueno arreglamos por $30 cada pareja y allí nos metimos por el tiempo que queríamos,... nadamos en esas aguas puras subterráneas y la panza fue bendecida nuevamente por la naturaleza. Cuando salimos con los dedos arrugados hasta las camios, la pinturita nos miraba con cara de traste por no haberla llevado. Bien con las pilas recargadas decidimos seguir camino hasta Valladolid donde llegamos casi entradas la noche. Pero unos km antes también pasamos por la entrada de Chichen-Itzá, pero esta vez no perdimos tiempo y ni paramos a preguntar. En Valladolid nos quedamos unos días trabajando aunque se vendía muy poco, era más que necesario. Dormíamos en una plaza secundaria de la ciudad y ni bien hicimos una buena venta nos fuimos en busca de otros cenotes más turísticos en las afueras de la ciudad. Allí bajamos hasta nadar en el cenote Samulá donde observamos boquiabiertos como por un gran hoyo en la tierra bajaban trenzadas las raíces de un viejo árbol (ahora muerto) a beber el agua pura del cenote... Después de unos días viviendo con lo justo en Valladolid, arrancamos para Cancún donde esperábamos conocer el famoso Caribe mexicano. Después de una tarde de andar en karavana por fin llegamos a esta ciudad ni bien entrada la noche. Buscábamos el parque de "las palapas" donde según nos habían dicho daban chance a los artesanos para vender. Pues bien resultó que donde estaban todos los turistas no te dejaban vender..., pero en cambio había una plaza marginal y con poca iluminación donde si dejaban poner a los artesanos... aunque a decir verdá, no... Por allí no pasaba nadie... un poco frustrados con todo nos estacionamos en otra plaza de ese complejo centro de Cancún donde un sujeto nos abordó diciéndonos que tenía una kombi y que quería acomodarla para viajar también. El hombre fue entrando en conversación y nos contó que se llamaba Victorio y enseguida nos presento a su esposa Ana. Ellos eran dueños de unos locales sobre el parque de las palapas de los cuales dos estaban alquilados para restaurante-bar y un tercero estaba en renta. Victorio y Ana entonces nos ofrecieron el local vacío para pasar la noche, que si bien no era muy cómodo para este propósito, era un poco mejor que la camio para dormir por el calor que hacia... llevamos los colchones, a la perra, las cacerolas, la cocina etc... La favela la armamo en tres minutos nomas. Ya instalados salimos sin éxito a vender por la noche de Cancún... a la mañana siguiente decidimos ir a conocer las playas publicas pero no a la de los hoteles, sino en dirección opuesta hacia el norte ya que según Ana y Victorio era el único lugar donde uno podía llevar a los perros a la playa... Bien habremos andado más de veinte km luego de dejar la ciudad bordeando la playa sin poder pisar más que la arena que se acumulaba en la carretera..., todo era pinche propiedad privada, todo era reja y alambrados. Finalmente al final de esta carretera toda rota se podía acceder a una agreste y descuidada playa caribeña, con mar revuelto y lleno de basura--- hasta los perros podían bajarse. Pasamos la tarde allí con nuestros compas y sus dos perros y la pinturita. Llegando el atardecer decidimos regresar hasta el parque de las palapas e intentar nuevamente vender pero la cosa apenas si marchaba. Ana y Victorio nos habían dejado una invitación para que vayamos a su casa en playa del Carmen donde estarían todo el fin de semana. Bien la mañana del domingo salimos hacia "playa" pero antes bajamos a las hermosas playas de la zona hotelera de Cancún esquivando los bodoques de cemento (hoteles) que algún genio se invento-. Lindo el mar Caribe pero no era nuestro estilo... así que después de un corto baño seguimos camino hacia "playa" y llegando nos encontramos con una gran ciudad con aires mas fresas... balnearios top, mucha gorra, mucho carro, mucho teléfono, mucho cuerpo bronceado, mucha papa en la boca... pero nosotros teníamos nuestros planes. Ubicados ya en la casa de Victorio y Ana compartimos un almuerzo y bebimos unas cervezas para luego acompañarlos a su entretenimiento favorito: el casino. Como no teníamos dinero ni muchas ganas de ir, ellos insistieron y nos dieron unas fichas para apostar. Pasamos una par de horas en la catedral del consumo, perdiendo plata ajena je!..., y si bien no ganamos nada, la pasamos chido con nuestros anfitriones. Bien tarde regresamos a la casa. El lunes por la mañana Ana y Victorio se regresaron a Cancún tras sus obligaciones pero antes nos ofrecieron la casa para que nos quedemos unos días. Bien teníamos nuevamente donde parar, pero sería posible vender?. Playa del Carmen se jacta de tener a los hippies a raya, decomisando trabajos, encerrando y deportando gente. De todas maneras salimos por la noche del martes a ver la onda y caminamos por la ajetreada 5ta avenida. Puro consumidero saturado de turistas y pensamos... dennos un par de horitas aquí tendidos y la armamos... pues bien encontramos un paseo de artesanos donde se las arreglaban mezquinamente bastante bien pa no dejar entrar a nadie más a vender, solo se permitía a los artesanos residentes en la ciudad previa constatación de domicilio en la cedula de identidad... bueno al menos uno de los artesanos nos paso el dato que había un muchacho de nombre "Juan" que era artesano y trabajaba como gerente en una joyería en la 5ta avenida. Decía que te rentaba unas mesas en el frente de la misma. Fuimos a verlo y nos ofreció una mesa de 1m x 1m para los cuatro. Bueno aceptamos..., nos repartimos la mesa y probamos suerte. La renta era cara pero valió la pena. Al día siguiente volvimos a hacer la vuelta y también salió bien... se vendía increíblemente y subiendo los precios nos daba para costearnos la mesa y seguir allí... teníamos techo, teníamos un lugar donde trabajar... que mas se puede pedir?... bueno para nosotros todo esto era temporal... decidimos ir por mas y escribimos a Valentin de chapala un correo contándole del embarazo y nuestra idea con la que fantaseábamos... tener nuestro bebe en el rancho de chapala, el mismo lugar donde habia sido invocado... Valentín nos respondió brevemente un correo diciendo que estaba todo bien y entonces el paso siguiente fue acercarnos a la oficina de migraciones para tratar de conseguir una visa de trabajo. Resulta que según nuestras cuentas lo máximo que nos atrevíamos a dilatar en estas tierras sureñas (y viviendo en la camioneta) sería como hasta el 6to mes de embarazo, en adelante queríamos estar establecidos donde fuéramos a recibir al bebe para evitar cualquier imprevisto. Si seguíamos ese plan y renovando nuestras visas lo más tarde posible en la frontera con guate (que estaba relativamente cerca) nos daría como resultado que a los tres meses de nacido el bebe deberíamos viajar nuevamente a renovar hasta la frontera y no sabíamos en qué condiciones íbamos a estar para ese entonces. Para evitar esto y poder internarnos en Méjico tanto como quisiéramos, necesitábamos asegurarnos al menos un año ininterrumpido de estancia en este país y la única forma posible era obteniendo otro tipo de visa diferente a la de turista. Bueno conseguimos el apoyo de Juan que firmo papeles por cuenta de la Joyería y nos acompañó a presentar los requisitos en la oficina. La panza también hizo su magia allí, es que ¿quien le puede decir que no a un par de hippies llenos de amor y de panza? bien nos aprobaron nuestros papeles... teniamos ahora todo un año por delante. Con esto resuelto dejamos finalmente playa y seguimos camino hacia la mágica tulum, el mejor caribe mexicano... allí después de una gran semana en la arena más blanca que pisamos nunca, el mar más turquesa que nunca y bajo un sinfín de cocoteros, nos despedimos de nuestros compas del camino y seguimos carretera hacia Chetumal y la frontera con Belice. Ahora, estábamos con apuro. Allí hicimos una breve entrada a la zona franca a comprar dos cubiertas nuevas y seguimos carretera hacia escarcega... fueron un par de jornadas agotadoras, lejos de la playa y cualquier río... finalmente para la segunda semana de abril llegamos nuevamente a Palenque donde nos quedamos a trabajar por la semana Santa. Allí hicimos nuevos amigos entre los músicos y otros artesanos y turistas que pasaban por allí... también vendimos e invertimos en piedras pensando en los días de taller y panza (pura creatividad). Pasada semana santa arrancamos hacia sancris donde quedamos un par de noches nuevamente en lo de Marilú. La panza ya cumplía 7 meses y nuestro destino final, el rancho chapala, aun aparecía muy lejos para nosotros.Fue entonces que decidimos encarar de inmediato hacia el norte y tratando de resumir el viaje optamos equivocadamente por la carretera de "cuota" (peaje) para llegar lo más pronto posible... circulando obligatoriamente por la mano derecha (vehículos lentos) nos pasamos saltando casi 1000km de baches y remiendos mal hechos..(para que cobran nos preguntamos?) Pero nadie pudo responder nuestra pregunta y se nos fueron más de 100 dólares en esa carretera en mal estado, hasta que un sábado por el mediodía ingresamos al distrito federal, buscando a un viejo amigo; Raul y su esposa Vero y los niños. Bueno hicimos los trámites que teníamos pendiente en la corta tarde del sábado y el domingo por la mañana tratamos de poner nuevamente en orden el encendido que venía fallando nuevamente. A pesar de cambiar todos los accesorios (platinos-condensador-rotor-tapa distribuidor-cables y bujías) no logramos dar una solución y la subida hacia Toluca fue de las más penosas que hemos hecho, casi a 20km/h por la autopista... hasta que bien todo lo que sube tiene que bajar y así dejamos Toluca y nuevamente embalamos al nautilus por la carretera libre hacia Morelia. Dos días después llegábamos a Chapala y al rancho de Valentín... Pues bien amigos los dejamos aquí nuevamente y prometemos seguir la próxima para poder cerrar el cuento de estos mágicos días de panza y carretera y si podemos, por supuesto, empezar a hablar en presente... así que nos leemos la proximita... Abrazos de la gente del camino....

4 comentarios:

tio_pacha dijo...

Loco, cada vez que leo una entrada nueva me emociono y siento que estoy viajando un cachito con ustedes. Que loco que les dieron la visa, México los va a cuidar, siempre y como hasta ahora.

Que siga la magia, que sigan los kilómetros, y sobre todo, que siga ese amor monumental que se tienen.

Un abrazo enorme de este nómade en reposo

Santiago dijo...

me re gustaron las fotos que sacaron, parece que es un hermoso lugar, todas las personas nos encantaría poder disfrutar del sol y de la playa todos los años. por lo que veo los hoteles en cancun en zona hotelera son los mas poblados para los turistas

Santiago dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Martin dijo...

Me encanto elviaje me gustaria saber como les resulto el alojamiento en cancun porque quiero ir para ahi en el verano